Fundación Norman Foster

Así es el refugio de Norman Foster en Madrid

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La Fundación Norman Foster se inaugura en un palacio reformado y ampliado por el propio arquitecto, para el cual ha diseñado un pabellón de acero y cristal en el patio, dando acceso así a un archivo donde se guardarán sus obras más relevantes.

Entrar a un palacio de 1902 diseñado por Joaquín Saldaña como casa de un aristócrata y encontrar dentro una figura reclinada de Henry Moore. Ese es el primer impacto al que nos lleva el recién inaugurado edificio que acogerá la Fundación del arquitecto británico ganador del premio Pritzker, Norman Foster. Tras esto, el denominado "pabellón de la inspiración" una reforma llevada a cabo en el patio central de la vivienda unifamiliar, que se ha visto cubierto por una estructura de acero y cristal basada en el dosel escultórico creado por el artista española Cristina Iglesias en colaboración con el arquitecto.

 

Esta cubierta da acceso a un sótano donde se sitúa a la biblioteca y un archivo de fotografías y colección de diapositivas donde se sitúan más de 74.000 artículos datados desde 1950. Dibujos, planos y proyectos se sitúan por todo el edificio, buen ejemplo de ello es un modelo a gran escala de la terminal del aeropuerto de Beijing, que cuelga en la pared de la gran escalera junto a una escultura de Brancusi y una figura china de Juan Muñoz. Contraste entre el arte y la arquitectura tan característico que nos sitúan una gran escultura hexagonal de madera, regalo de Ai Weiwei, en una mesa de reunión.

 

También un contrachapado de madera con la silueta de un paisaje del Centro Sainsbury de la Universidad de East Anglia cargo de Henry Moore, domina el edificio. Una instalación que vino inspirada por el hombre reclinado del escultor británico, que ha "ayudado" según el arquitecto a colocar el perfil de madera en su ubicación actual. Un edificio donde la arquitectura y la escultura se dan la mano de forma moderna e innovadora, no solo en la forma sino también en los paisajes. Una innovación en los materiales que Foster ha contagiado a Iglesias, que en su colaboración con el arquitecto ha empleado por primera vez fibra de carbono para elaborar la cubierta.

 

Un proyecto complicado que, debido a las fuertes reformas del edificio, se vio prácticamente paralizado y cancelado en 2014. Afortunadamente, se llegó a un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid y ya podemos disfrutar de una nueva maravilla arquitectónica en la capital. 

Cubierta del patio interior diseñada por Cristina Iglesias. Foto: Fundación Norman Foster

Investigación, arquitectura y archivo

Uno de los objetivos de la Fundación es apoyar la investigación interdisciplinar y la colaboración entre profesionales. Asimismo, busca ayudar a los jóvenes arquitectos e ingenieros en una etapa formativa de sus carreras. "Soy consciente de que he pasado toda mi vida va contra el sistema", ha admitido Foster quien dice haber tomado un "gran riesgo" durante su época de estudiante en la Universidad de Manchester donde al tener que realizar un dibujo a medida durante el verano, en lugar de elegir un señorial edificio o una vivienda eligió molinos de viento y graneros. 

 

Por esta razón de riesgo, y con motivo de la inauguración tuvo lugar en el Teatro Real el foro mundial Future is now donde se abordó la relación entre las ciudades, el diseño, la tecnología y las infraestructuras. Buscando de este modo abordar desafíos sociales y económicos presentes en la sociedad actual. Una vocación de investigación que la Fundación Norman Foster viene realizando desde 1999, proporcionando anualmente becas del Real Instituto de Arquitectos Británicos de Londres (RIBA) para ayudar a los estudiantes de arquitectura a viajar por el mundo para investigar sobre el futuro de las ciudades.

 

Marina Prats

Marina Prats

Marina Prats es periodista y experta en comunicación cultural.

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