Mario Vargas Llosa vuelve a recibir el título de Doctor en la Universidad Complutense. Ya lo recibió hace 45 años, cuando presentó su tesis doctoral García Márquez. Lengua y estructura de su obra narrativa. Sin embargo, perdió el título –“durante años en varias ocasiones lo busqué sin encontrarlo. Pensé incluso que lo habría extraviado en mis numerosos viajes”-. No obstante, el escritor peruano ha recibido una réplica ad hoc de la mano del rector de la universidad, Carlos Andradas.
En el acto en la Universidad Complutense, el Premio Nobel de Literatura rememora su relación intelectual y literaria con Jorge Luis Borges, con quien reconoce que fue algo compleja. “En cierto modo, me avergonzaba que me gustara. Él era todo lo contrario a lo que yo quería ser como escritor”, señala Vargas Llosa. Sin embargo, solo lanza buenas palabras hacia el escritor argentino: “Es el único escritor contemporáneo en nuestra lengua que puede compararse a un Quevedo, un Góngora o un Cervantes. Su riqueza de lenguaje, originalidad, la revolución que causó, es tan importante como la de esos clásicos que marcaron nuestra lengua”.
Vargas Llosa, en la Universidad Complutense. / Foto: Jesús de Miguel
Vargas Llosa tuvo un dilema nada más comenzar a leer a Borges en la década de los 50. Siempre se ha considerado seguir del discurso de los existencialistas franceses, basado en el uso de la literatura como arma social y política y la involucración del escritor en temas sociales. Sin embargo, Borges discrepaba de todo ello: “Él era un desinteresado de su tiempo, un desinteresado de los problemas sociales, hablaba de la política de manera despectiva, le interesaba la metafísica, el pasado y vivía en una especie de irrealidad”. Todo ello, no le quitaba ser “un grandísimo escritor. Era elegancia, precisión, tenía un deslumbrante uso de los adjetivos… Era, y es, el escritor más literario entre los escritores. Una perfecta máquina que transformaba todo en literatura".
Cara a cara entre ambos escritores
Mario Vargas Llosa y Jorge Luis Borges coincidieron en varios momentos de sus vidas. El primero de ellos fue en 1963, cuando Vargas Llosa entrevistó en París al escritor argentino para la Radio Televisión Francesa en un homenaje a Shakespeare. En 1981 le volvió a entrevistar una vez más.
Sin embargo, el autor peruano lamenta no haber conocido en profundidad en aquellas ocasiones a Borges. Quería conocer a la persona que se escondía “tras el personaje literario que se construyó y que representaba en sus contactos con la sociedad”. Para Vargas Llosa, el escritor argentino creó un personaje diferente por su literatura. “La literatura, en cierta forma, sustituyó a la vida. Tuvo experiencias intelectuales muy ricas, pero vitales muy escasas, lo que da a su obra un cierto patetismo. Hay zonas de la vida humana que para él son inexistentes: el sexo, la pasión, el amor...".