José María Lassalle sale de Cultura. Tras el inicio de la legislatura no volverá a repetir como secretario de Estado de Cultura. Lassalle ha sido mano derecha de José Ignacio Wert y, más tarde, de Íñigo Méndez de Vigo. Llegó en 2011 con un montón de propuestas y deberes que cumplir y se marcha por la puerta de atrás, tras haber “encabronado” al sector cultural.
Fernando Benzo (Madrid, 1965) será su sucesor, el mano derecha de Méndez de Vigo, actual ministro de Cultura. Benzo, licenciado en Derecho y con una larga trayectoria en la Administración Pública, tendrá que hacer frente a todos los desbarajustes que dejó José María Lassalle.
Méndez de Vigo no solo es ministro de Educación, Cultura y Deporte, sino también portavoz del Gobierno. Esta tarea le dejará colgado de algunas de las tareas en cultura que hay que realizar. Para eso Benzo será su hombre, el que tenga que hacer frente a las protestas del sector cultural y cumplir la palabra dada.
José María Lassalle. / Wikipedia
Y es que en estos últimos cuatro años no se han llevado a cabo las promesas que el PP llevó en las elecciones de 2011. La primera de todas: “bajaremos los impuestos”. No fue así, más bien lo contrario. En septiembre de 2012, el Gobierno subió del 8 al 21% el IVA cultural, buscándose un nuevo enemigo entre las empresas culturales. Lassalle ya no podía decir que se bajarían los impuestos. Pero no dependía de él, sino de Hacienda.
Liberal de espíritu, el antiguo secretario de Cultura vio cómo pasaba la legislatura sin cumplir sus principales tareas. La Ley de Mecenazgo nunca salió. No hubo incentivos ni desgravaciones fiscales para las empresas culturales. El Ministerio de Cultura se excusó diciendo que ya estaba incluida la Ley de Mecenazgo en la reforma fiscal aprobada en 2015.
El cambio del canon digital fue una sus medidas estrella, que ha acabado estrellada. Pasó el canon a los Presupuestos Generales del Estado. Eso sí, bajó de 100 a 5 millones de euros. Sin embargo, hace una semana el Tribunal Supremo anuló el canon digital. Adiós a esta medida.
Entre las medidas tomadas por Lassalle que sí han sido valoradas positivamente por el sector cultural son la reforma integral del Museo Arqueológico Nacional, su apuesta por la arqueología subacuática y la Ley propia de la Biblioteca Nacional de España. Ahora, Benzo tendrá que arreglar las tareas pendientes y contentar a la industria cultural.
