Una serie de negociaciones entre el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el Papa Francisco I ha servido para llegar a un acuerdo de intercambio de arte entre ambos países. Así, la Galería Estatal Tretiakov de Moscú ha abierto las puertas de la exposición Roma Aeterna, que recoge un total de 42 pinturas pertenecientes a la colección de los Museos Vaticanos.
La exposición supone "un signo de amistad entre la Iglesia Católica y la Ortodoxa"
La muestra, que podrá visitarse hasta el próximo 19 de febrero, exhibe una obra que se ha resistido hasta el final y que se ha resuelto gracias a la diplomacia entre Putin y el Papa Francisco. Se trata del Santo Entierro (1602-1604) de Caravaggio, que no se esperaba que fuera llevada hasta Rusia. A cambio, la Galería Tretiakov se compromete hacer un préstamo recíproco al Vaticano en otoño de 2017.
“Todo esto ocurrió gracias a una reunión entre Vladimir Putin y el Papa Francisco”, afirma el director de los Museos Vaticanos, Antonio Paolucci, a la agencia de noticias Rossiya Segodnya, que confirma que la primera reunión sobre este intercambio fue en 2013.
Las obras expuestas en la galería rusa “representan lo mejor de lo mejor de las colecciones vaticanas”, valora Paolucci. “Esto requirió un gran sacrificio de los Museos Vaticanos porque seis millones de personas los visitan anualmente. Nos tomamos esta responsabilidad, este sacrificio voluntario porque es una forma de cooperación cultural, una forma de comprensión mutua y de investigación que, por supuesto, continuará”, recalca el director.

Santo Entierro (1602-1604) de Caravaggio. / Museos Vaticanos
Paolucci reconoce que el Papa Francisco conoce muy bien la muestra, y que le supone “un signo de amistad entre la Iglesia Católica y la Ortodoxa”.
En una reunión celebrada esta semana entre el Patriarca ruso Kirill I y el cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, el patriarca ruso valoró la exposición como “un acontecimiento cultural significativo y al mismo tiempo un factor importante para el desarrollo de nuestra relaciones bilaterales”.
Para el comisario de Roma Aeterna, Arkady Ippolitov, es especialmente importante para los rusos tener la posibilidad de ver el Lamento sobre los muertos (1471-74) y El milagro de San Vicente Ferrer (1473) por Ercole de Roberti. Ippolitov se muestra sorprendido de que el Vaticano haya prestado este último trabajo.
La muestra ha sido financiada por la Fundación para la Caridad Artística, Científica y Deportiva de Alisher Usmanov, considerado el hombre más rico de Rusia según Forbes. Sin embargo, la fundación no ha querido dar a conocer el coste del montaje de la exposición. Por ahora, ya hay entradas agotadas para los primeros días.